Es un cálculo sólo del consumo de alimentos. Crece la demanda de accesorios y la diversidad de productos.
Alimentarlo con lo mejor que ofrece el mercado, cubrirlo del frío y -de paso- que esté a la moda, recortarle el pelo asiduamente y, obviamente, bañarlo de manera cotidiana (con servicios a domicilio que lo hagan, si es posible) son algunos de los mimos que, cada vez más, las familias mendocinas ofrecen a sus perros y gatos. Eso, por no mencionar que hay quienes les lavan los dientes o les compran "joyas" y hasta sandalias para que disfruten mejor de su vida animal.
En Mendoza se venden alrededor de 1.000 toneladas de alimento para mascotas por mes en todas las variedades y calidades que existen. Esto implica, aproximadamente, un movimiento de más de 8 millones de pesos por mes. Esa cuenta, a base de promedios conservadores de los precios de venta al público, por lo que podría ser bastante más.
Esto implica un movimiento de unos 100 millones anuales. Es que el mercado viene creciendo desde hace diez años de manera sostenida a un ritmo que va del 10% al 20% anual, superando así el movimiento general que ha tenido la economía argentina durante el último tiempo.
Eso, sin contar el boom de los accesorios de los que no hay estimaciones finas pero se trata de un fenómeno que le ha dado una fuerza extra al mercado. Aunque se trata de un fenómeno relativamente reciente en Mendoza, crece de manera exponencial. De hecho, los locales destinan cada vez más espacio a mostrar este tipo de productos que innovan en diseño, materiales y variedad.
Aunque para éste y el próximo año es probable que el ritmo se frene apenas, se espera que la ecuación continúe en alza. La posibilidad de seguir creciendo se da no sólo porque, en la opinión de quienes manejan el negocio, el mercado tiene una potencialidad no explotada de al menos un 40% sino también debido a que el público que consume lo que los llamados pet's shops tienen para ofrecer, es multitarget. Es decir que no se segmenta por su nivel económico sino por el lugar que la mascota ocupa en el hogar.
"Puede haber gente de mucho dinero que compra lo más barato así como los que no poseen tanto pero realizan gastos más grandes para sus mascotas, porque se han convertido en un miembro más de la familia", coinciden las voces del sector.
Perspectivas
"Hoy, nuestra principal competidora es la comida casera", aseguró Oscar Frugoni, gerente de Eukanuba en Cuyo (una línea top con alimentos exclusivos para algunas razas, que también posee Iams y abarca a los gatos). Para el empresario -que está hace 8 años en el rubro- el consumo de este tipo de alimentos en Argentina recién ha sobrepasado un 40% por lo que el mercado tiene amplia potencialidad.
En este sentido, Hernán Sandaza, gerente regional de Ventas en Cuyo de Nestlé Argentina, división Purina, explicó que el mercado viene creciendo de manera sostenida desde 2000 debido a que la gente está comprendiendo la ventaja de ofrecer alimento balanceado a sus mascotas, en lugar de comida casera.
En la misma línea, Gustavo Di Paola, dueño de la cadena Full Pet´s que está en los súper e hipermercados y que acaba de inaugurar una sucursal en Walmart, expresó que aún hay perros que están sin alimentación, por lo que las perspectivas de crecimiento son interesantes.
Por su parte, Enzo Bianchi, representante en Mendoza de Vital Can y Vital Cat -una empresa argentina creada por veterinarios que incluye alimentos para perros y gatos y que se comercializa, justamente, a través de las veterinarias- expresó que el crecimiento de la firma en Mendoza ha rondado el 20% anual y que para éste y el próximo año también esperan crecer pero unos cinco puntos menos. "La inflación y la disminución de los salarios termina afectando al negocio", sostuvo el empresario que hace siete años trabaja la marca.
La clave del negocio pasa, no obstante, por el amor que los dueños tienen por sus perros y gatos que los lleva a invertir no sólo en un buen alimento sino también en golosinas, juguetes, ropas y otros regalos hasta para el día de su cumpleaños. A esto hay que agregar los servicios de peluquería, corte de pelo, baño y -por supuesto- las reglamentarias visitas al veterinario que incluye vacunación y otros servicios básicos de salud.
"Los números del mercado se han sostenido por encima de lo que ha venido creciendo el país", explicó Diego González, gerente de la cadena Mi Mascota y representante de Sabrositos en Mendoza así como de los accesorios para perros y gatos Namuht. Con 9 años en el negocio, González tiene cuatro sucursales propias y dos franquicias, una inaugurada hace menos de un mes.
La apertura de este tipo de negocios en barrios alejados y centros urbanos es una muestra del comercio que se genera alrededor de perros, gatos y mascotas en general. Atraídos por las posibilidades de ganar una porción del jugoso mercado, cada vez más empresas se suman al rubro de los balanceados. "Muchos molinos que eran harineros ahora se han dedicado a esto", contó González, quien estimó en unas 200 la cantidad de marcas registradas para alimentos en Argentina.
Un mercado segmentado
El mercado está dividido en cuatro segmentos diferenciados por calidad y precio: súper premium (entre $ 16 y $ 25 el kilo), premium (entre $ 10 y $ 12), estándar (entre $ 5 y $ 8) y económico (entre $ 3 y $ 4). Además de las diferencias en el costo de los alimentos que oscila en un promedio de $ 13 y $ 3 el kilo, también existen segmentaciones referidas a la raza, el tamaño del animal así como a sus necesidades de -entre otras- mantenerse, bajar de peso, ganar energía o en relación a la medicación que se le suministra.
En la línea de gatos, las opciones también son variadas y no sólo se dividen en gatos castrados, adultos y gatitos sino que también hay variedades para los que tienen problemas urinarios o los que son gordos, por caso. Aquí, la cantidad de productos, no obstante, es menor a la existente para perros. "Antes, la opción era sólo para cachorros o adultos pero ahora hay una infinidad de variedades", subrayó Frugoni.
La amplia gama de productos no sólo influye en el crecimiento del mercado sino en las vastas posibilidades a la hora de adquirir el alimento para la mascota. Los mismos pueden conseguirse en veterinarias y pet's shops (que ofrecen una amplia variedad) así como en supermercados y forrajerías o corralones, donde suelen comercializarse las marcas más baratas.
"En general, los pet shops y supermercados se llevan más del 70% del volumen de venta", explicó Enzo Bianchi mientras que González opinó que las nuevas marcas que van saliendo suelen posicionarse por precio aunque también la calidad es importante. En general, cada una encuentra su nicho. "Las categorías premium y súper premium son segmentos establecidos en los que no es fácil el ingreso de nuevos jugadores", aportó el gerente de Mi Mascota.
El boom de los juguetes
Camperas con cuello de piel sintética, trajes de baño, lentes, pilotos, camisetas de Argentina, joyas, zapatitos y sandalias, bolsos, canastos, collares con campanita, huesos con el nombre y la dirección, golosinas, buzos estampados con animal print, son algunos de los productos que dueños de perros y gatos suelen comprar de manera casi compulsiva. Por este motivo, el espacio que las tiendas de mascotas dedican a este tipo de accesorios es cada vez mayor.
A diferencia de lo que viene sucediendo con los alimentos, el de la ropa y los juguetes es un mercado relativamente más nuevo que ha explotado, por decirlo de algún modo, en los últimos años. "Es algo que ha crecido más porque hay más difusión y variedad", expresó Di Paola, quien mencionó que ciertas restricciones de las importaciones podrían afectar esta diversificación.
La clave en este rubro está en mostrar lo más posible para que la gente se tiente mientras está haciendo alguna otra compra. Además, se trata de productos que -en general- tienen mayor margen de ganancia que los alimentos. "La tendencia es dar mayor porcentaje del local a los accesorios ya que si están escondidos nadie los compra", explicó González quien acaba de inaugurar una franquicia en Godoy Cruz prestando especial atención a este modelo.
En los barrios caros de Capital Federal hay negocios que destinan más del 50% del espacio a mostrar los chiches nuevos para perros y gatos. En Mendoza, este modelo comienza a replicarse en las cercanías de los countries más exclusivos como Palmares. Aquí es donde suelen encontrarse las mayores "excentricidades" para vestir o adornar a la mascota.
"La gente gasta cada vez más en accesorios. Algunas cosas cuestan lo mismo que la ropa de chicos", esgrime Enzo Bianchi. En general, todos descartan que se trate de una moda y hacen hincapié en el valor de las mascotas dentro del hogar. No obstante, admiten que la reciente difusión de los perros chicos como caniches toy y otros (con mayores posibilidades de estar a la moda) han sido un aliciente en la explosión de la tendencia a la que -por ser nueva- le queda mucho más por ganar que al mercado de balanceados.
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