EL BLOG PERSONAL DE:

"Llegará el dia en que las personas vean el asesinato de un animal con el mismo horror con el que ven el de un ser humano"
Leonardo Da Vinci

TODOOOOO!!!

Cargando...

Lo que dice la cola del perro


El perro utiliza su rabo para comunicarse, una poderosa herramienta de información que fascina a los científicos.

Por EVA SAN MARTÍN
27 de febrero de 2013
en Eroski Consumer
Adaptación de la nota.
Enviado por Paco desde Madrid
---
El perro se comunica con sus ojos, con la posición de su cuerpo, sus ladridos, sus orejas... Pero también (y mucho) a través de su cola. De hecho, esta extremidad es una potente herramienta de comunicación del perro que llama la atención de los científicos. 

No significa lo mismo si esta extremidad se mueve hacia su derecha o hacia su izquierda.

La cola del perro habla sin palabras

La cola del perro es un potente vehículo de comunicación canina. "El animal intercambia mucha cantidad de información a través de su cola, sus movimientos y las diferentes posiciones que adopta", aseguran los biólogos Stephen Leaver y Thomas Reimchen, de la Universidad de Victoria en Canadá. "El perro expresa su estado de ánimo y predisposición para jugar o pelear a través de su cola".

"Aunque el perro se ha diferenciado de su antepasado el lobo, su rabo aún ofrece información acerca de cuál es su estado de ánimo, sus ganas de jugar, su predisposición a hacer amigos e, incluso, sobre si siente miedo o temor", concluyen los científicos.

Estos investigadores han estudiado la respuesta de cerca de 500 canes frente a distintas posiciones -y movimientos- de cola de otros congéneres. Para ello, crearon un robot canino. Es decir, un perro artificial capaz de reproducir los diferentes meneos y vaivenes característicos de este locuaz apéndice canino.

Alta o baja, la información cambia

El perro-robot de Leaver y Reimchen era capaz de mover su cola pero también de colocar su puntiaguda extremidad en distintas situaciones y alturas, simulando a los canes reales.

De esta forma, los investigadores pudieron comprobar cómo la cola del perro funciona como un termómetro de sus emociones. Es decir, varía en función de los sentimientos del can.

Una posición media del apéndice informa de que el perro está relajado y tranquilo. Sin embargo, si el can tensa su rabo y lo estira en la posición horizontal, como si se tratara de una cuerda rígida, algo habrá despertado la atención del animal: el can está en alerta.

La cola del perro puede subir aún más, y colocarse casi en posición vertical. "Las posiciones altas de esta extremidad están relacionadas con confianza en sí mismo e incluso cierta agresividad en algunos casos", señalan los investigadores.

Por el contrario, a medida que la cola del can baja de altura, el animal indica con cada vez mayor énfasis que no busca problemas. El can informa que se muestra sumiso y que no está interesado en una eventual pelea.
Derecha no es igual que izquierda para la cola del perro

La altura a la que un perro coloca su cola no es la única forma de comunicarse a través de esta locuaz extremidad canina. Los característicos movimientos del rabo expresan otros mensajes que conviene conocer.

Los rápidos balanceos laterales de la cola del perro suelen ser interpretados como que el perro se muestra amigable y tiene ganas de jugar. Sin embargo, ¿es esto siempre así? Según algunos estudios científicos, no.
Un perro que balancea su cola no siempre está contento, sino que depende hacia qué lado lo haga

"Cuando los perros ven a sus dueños y se sienten felices agitan su rabo más hacia el lado derecho de su cuerpo, mientras que si se sienten amenazados moverán su cola más hacia el lado izquierdo", señala el neurocientífico Giorgio Vallortigara, de la Univeridad de Trieste (Italia), en un estudio publicado en la revista científica 'Current biology'.

Pero, ¿por qué el can mueve su cola hacia lados distintos en función de sus sensaciones? La explicación hay que buscarla en su cerebro. Como ocurre en los humanos, la parte izquierda de este importante órgano gestiona los sentimientos positivos y agradables del animal, como el amor y la afectividad en el perro o la tranquilidad.

Por el contrario, la parte derecha del cerebro canino se encarga de los sentimientos negativos, como el miedo o la depresión.

Como la mitad izquierda del cerebro del perro controla la actividad de la parte derecha de su cuerpo, los sentimientos positivos y de alegría implican que la cola del peludo amigo se mueva más hacia su lado derecho.

Y, por el contrario, ya que la mitad derecha del cerebro del can controla la parte izquierda de su cuerpo, "cuando el perro se siente amenazado mueve más su cola hacia el extremo izquierdo", concluye Vallortigara.

Malentendidos con la cola del perro

Sin embargo, los malentendidos no son extraños cuando se trata de descifrar lo que el can dice a través de su cola. Y, por ello, conviene recordar que no todos los perros tienen el mismo tipo de rabo. Es muy distinta la cola enrollada de un simpático carlino que el expresivo rabo de un pointer.

Por ello, cuando se trata de interpretar el lenguaje canino habrá que considerar cuál es la posición habitual de la cola de cada perro. Y, en función de la misma, interpretar lo que dice.

"Las personas debemos aprender a descifrar de forma correcta lo que los perros tratan de decirnos, aunque no utilicen sus ladridos", dice, por su parte, la investigadora Pamela Robie.

A pesar de los estudios científicos realizados en este campo, Robie cree que aún queda un largo camino que recorrer en el campo de la comunicación canina.

"Los humanos hemos aprendido a leer solo parte de lo que el perro dice con su cola. Pero, entre los canes, ¡la cantidad de información visual que se mandan a través de esta extremidad y otras posiciones de su cuerpo es ingente!", concluye Robie.
---

Perros que comen frutas


Peras, manzanas, plátanos, arándanos... 
Estos alimentos no solo pueden formar parte de la dieta humana. "Frutas como la manzana y la pera aportan grandes beneficios al perro", señala el veterinario y dietista canino, Carlos Alberto Gutiérrez, autor del blog Nutricionista de perros.

Frutas como el plátano o los arándanos aportan antioxidantes y fibra al perro

Los beneficios que tienen algunas frutas para el can han sido también estudiados por Rick Woodford, autor del libro 'Alimenta mejor a tu mejor amigo' ('Feed your best friend better', Andrews MsMeel, 2012).

"Las comidas y piensos procesados para perros contienen el balance apropiado de proteínas, grasas, vitaminas y minerales que el animal necesita", explica Woodford, que también escribe el blog Dog food dude. Sin embargo, añade Woodford, estos alimentos envasados para perros también contienen algunas carencias: "carecen de antioxidantes y otras vitaminas y sustancias que sí contienen los alimentos naturales como la fruta". Estas sustancias presentes en la fruta, añade, son importantes para asegurar la salud del can a largo plazo. "Previenen enfermedades como el cáncer o las dolencias de corazón en el perro", afirma.

Algunas frutas, además, son ricas en fibra, apunta Gutiérrez por su parte. "Aunque los perros no necesitan tomar mucha, ingerir pequeñas cantidades de fibra beneficia su sistema digestivo", asegura.
Frutas que sí puede comer el perro

Antes de introducir cualquier fruta en la alimentación de un perro hay que consultar con el veterinario o nutricionista canino. No todas las frutas son buenas para el can: las hay algo peligrosas e, incluso, tóxicas para canes, como las uvas y las pasas, siempre que el animal las ingiera en grandes cantidades.

¿Qué frutas sí son beneficiosas? Woodford, que empezó a cocinar en casa para sus perros después de que a uno de ellos,Jackson, le diagnosticaran cáncer, recomienda el siguiente listado de "frutas saludables para canes":

1. Arándanos (son antioxidantes)
2. Plátanos
3. Manzanas
4. Peras
5. Mangos
6. Papayas
7. Melones
8. Albaricoques
9. Ciruelas
10. Naranjas
Cuidado con las semillas y otras precauciones

La cantidad de fruta que el perro ingiera debe estar supervisada por el especialista. Esto es importante ya que no todos la aceptan. Algunos, incluso, pueden padecer alergias.

Y no debe sustituir a la dieta habitual del perro: se trata, en todo caso, de un complemento y en pequeñas cantidades.

¿Otras precauciones? "Todas deben estar libres de pipas y semillas antes de ofrecérselas al perro", remacha el autor de 'Alimentar mejor a tu mejor amigo '. Lo importante es lograr una dieta equilibrada para el perro, señala, por su parte, el veterinario Fausto Andrés. "Si el perro se alimenta con la cantidad de proteínas suficientes, se le puede ofrecer frutas sin problemas", asegura
¿Cómo lograr que el perro coma fruta?

Introducir las frutas en la dieta del perro desde que es un cachorro es una de las claves para que el can acepte este alimento. "Cuando esto ocurre, es habitual que el perro las disfrute y se las coma solas, sin necesidad de tener que mezclarlas con otras viandas", apunta Gutiérrez. Lo ideal, coincide Woodford, es "comenzar cuando son pequeños, con distintas frutas dentro de sus cuencos de comida". Que un perro adulto no habituado acepte las frutas como parte de su dieta es algo más complicado. Para ello, Gutiérrez propone mezclarlas con otros alimentos, como sardinas enlatadas o pollo. Y hacer un puré con los frutos, como explica este vídeo.

Es mejor cortar la fruta en trozos, para que el perro muerda su carne

Woodford aporta otro consejo: cortar la fruta en trozos. "Muchas frutas están envueltas en una piel dura, que puede suponer una resistencia para el perro. Cortarlas en pedazos ayuda a que el can muerda la carne de la fruta y que no sea la piel lo primero que encuentre".

La pauta, de nuevo, es no caer en el exceso. "La fruta no debe sustituir a la alimentación habitual, sino ser ofrecida como premios o regalos", concluye Andrés.

Consejos para ofrecer frutas al perro
Hay frutas beneficiosas para el perro. Entre ellas, la manzana, los arándanos y el plátano.
Otras, como las uvas o las pasas pueden ser tóxicas para el can, si las ingiere en grandes cantidades: dañan sus riñones.
Algunos veterinarios recomiendan retirar las semillas de las frutas (manzanas, peras albaricoque, etc.) que se ofrezcan al perro: son perjudiciales e inflaman su aparato digestivo, en especial si son grandes.
Antes de introducir frutas en la dieta del perro hay que consultar con el veterinario o nutricionista canino: no todos los canes aceptan el mismo tipo de dieta.
Cualquier cambio en la alimentación del perro debe ser paulatino, y supervisado por un profesional: no se pueden descartar posibles alergias.
Las frutas no pueden sustituir la dieta habitual del can: se trata de un suplemento que debe ofrecerse en pequeñas cantidades.
Un cachorro que coma fruta la aceptará mejor cuando sea adulto.
Mezclar peras o manzanas con alimentos naturales y sabrosos, como el pollo, ayuda a que el perro acepte estos alimentos.
---
**Visita: http://bohemiaylibre.blogspot.com

La dureza del corazón humano - por Maricruz Tasies



La dureza del corazón humano
por Maricruz Tasies


Qué les diré? Con la película basada en hechos de la vida real y cuyo personaje principal es Hachi, un perrito japonés que cayó por cuestiones de la Divina Providencia en manos del personaje que protagoniza Richard Gere, no hice más que hacer lo que no hago hace años: llorar y llorar a mares viendo una película.
Y no lloré por lo que han de haber llorado la mayoría de los amantes de los perros, ni me he compadecido porque lo que se compadecieron la gran mayoría de espectadores. No.
Es cierto que la lealtad del perro que esperó a su dueño durante nueve años cada día a las cinco de la tarde en la estación del tren es sobresaliente pero no fue por eso que lloré ya que a lo largo de mi vida he recogido no menos de treinta perros callejeros a los que he incorporado plenamente a mi diario vivir sin importarme su origen, apariencia, olor, enfermedades, manías, temperamento por lo que conozco de sobra cuán leales pueden ser los animales.
Su lealtad, a quienes podría haber admirado es a quienes no conocen de lealtades perrunas pero tampoco de lealtades humanas porque, para empezar, si la viuda del propietario de Hachi hubiese conocido de lealtad habría hecho lo imposible por conservar al perro, también lo hubiera hecho su hija y también su amigo japonés.
Pero el caso es que nadie se interesó por el destino del pobre animal, no hubo quien lo incorporara a su vida plenamente, no consiguió quien le ayudara a superar su duelo ni conmover las entrañas de nadie durante los nueve años que duró su espera.
Después de haber probado el ser incondicionalmente amado, murió como un perro callejero más: sucio, hediondo, enfermo, triste, solo. Así murió un día de invierno en la estación del tren.
Ahora saben por qué lloré? Pues sí, lloré como pocas veces y fue por advertir lo duro del corazón humano, lo dramáticamente imposible que se le hace colocarse en el lugar de los demás y mucho menos en el corazón de un perro.
Claro, de ahí que a nadie debería sorprender el aborto, la eutanasia, la FIV y todo lo demás que me tiene el corazón hecho un puño.
Yo, es que –sobre la lealtad- la aprendí primero de Dios, luego de algunos de mis semejantes pero principalmente de la lealtad de mi madre y padre; de último, la aprendí de mis perritos a los que no lloro cuando fallecen ya que gracias a lo que Dios me ha dado he podido darme cuenta de la gratitud con que todos ellos han vivido bajo mis cuidados por lo que no encuentro razones para llorar a menos que alguien les quite la vida deliberadamente por lo que, indefectiblemente, lloro en cada caso y únicamente por advertir la dureza del corazón humano.
Así, con ese llanto ahogado, debe ser como nos llora Dios; por eso mismo ha de haber sido por lo que su Hijo nos fue enviado y gracias a quien hemos recibido lo único que nos sostiene: la Esperanza.

---
ENVIADO POR PACO DESDE MADRID.
---
**Visita: http://bohemiaylibre.blogspot.com

Alimentación "bio" para mascotas


Cada vez más animales domésticos se alimentan de productos biológicos: carnes de granjas ecológicas cocinadas con verduras orgánicas; piensos a base de ingredientes con propiedades saludables (lentejas, garbanzos y arroz integral para aportar hidratos de carbono de bajo índice glicérico; espinacas, tomates, zanahorias, yuca y arándanos, cargados de antioxidantes y vitaminas, aceite de oliva para aportar ácidos grasos monoinsaturados…).

Como muestra interesante de la evolución que está viviendo la gastronomía animal, los fabricantes de comida ya no dudan a la hora de recomendar a los dueños que prueben ellos mismos los platos antes de ofrecérselos a sus perros y gatos, según un reciente artículo del New York Times sobre la gran feria anual de productos para mascotas que se celebra en Orlando, Florida.

Enviado por Paco desde Madrid.
---
**Visita: http://bohemiaylibre.blogspot.com

Testículos de silicona para mascotas.


Hoy en día se pueden comprar los accesorios más variados para animales. Están por supuesto los juguetes, gorros y abrigos de lujo. También antidepresivos para perros y gatos melancólicos.
Una empresa norteamericana incluso ha lanzado al mercado unos testículos de silicona para perros y gatos castrados, en varias versiones y a un precio de hasta 1.000 dólares el par. Sus creadores explican que estos testículos falsos “ayudan a la mascota a mantener su apariencia natural, la confianza en sí mismo y a superar el trauma ligado al cambio”.

Un comentario de Paco desde Madrid.
---
**Visita: http://bohemiaylibre.blogspot.com

Mascotas españolas entre guáus y miáus



En seis de cada diez viviendas españolas vive al menos una mascota. 20 millones de perros, gatos, pájaros y peces conviven con sus dueños en 8,5 millones de hogares. A ellos se suman también unos dos millones de animales exóticos, como pequeños mamíferos y reptiles.

Las mascotas no se pueden quejar, pues las atenciones que les dedican sus dueños también están aumentando, sin que ni la crisis ni el paro apenas estén afectando, según distintos estudios consultados. Por ejemplo, en el caso de los perros, el gasto medio por familia en los cuidados de su mascota (alimentación, accesorios y cuidados veterinarios) ronda los 1.500 euros al año.

Nos deberíamos alegrar: Gandhi decía que “el grado de civilización de un pueblo se mide por la manera en la que trata a sus animales”. Aunque, por desgracia, en España no a todos los animales se les trata igual de bien.

Nota original de:
http://clicks.saludnutricionbienestar.com//t/AQ/AA2yhw/AA3Hpg/AAgKsQ/AQ/A3G5dw/jqSw
Enviada por Paco desde Madrid.
--

**Visita: http://bohemiaylibre.blogspot.com